lunes, 25 de marzo de 2013

Atracón esquivado + compañeras pesadas

Sé que os parecerá una tontería eso pero necesitaba dejar constancia de ello. Cuando escribí la anterior entrada, estaba deseando que Alice se fuera a clase por fin porque tenía mono por todo el malestar que tengo debido al rechazo amoroso que tuve con ella. ¿Qué significa mono en mi mundo? Significa que  cuando se marchara Alice bajaría al Lidl que tengo justo abajo y me compraría mis chocolatinas favoritas (en la imagen), para atracarme lo máximo posible en el menor tiempo y luego arrepentirme y llorar y llamarme gorda. Esos son los efectos de mi mono y siempre funciona así; he de bajar a comprar porque no guardo guarrerías en casa para evitar tentaciones más a menudo. Puedo hacerlo fácilmente si están mis otras compañeras en casa, pero Alice sabe de mis problemas con la comida y es imposible engañarla, por eso he de esperar a que no esté.

Como además tenía hambre porque llevo dos días comiendo muy poco (hasta que no pasan 4 días seguidos comiendo poco tengo el problema de poder caer en atracones porque tengo hambre a todas horas), he decidido hacer boca con un trozo de bizcocho casero. Total, como digo siempre, una vez me paso de las calorías permitidas por mi enfermiza mente, me da igual 100 que 1000 calorías de más. Lo he disfrutado como una marrana y mientras lo comía no paraba de imaginarme mojando esas deliciosas chocolatinas de cacahuete en té caliente, para que se derrita la parte exterior, y engulléndolas como loca. Así de guarros son mis momentos atracón.

Por fin, justo cuando he acabado de comer, Alice se ha marchado y se me han cruzado los cables. He pensado "estoy totalmente sola en casa por primera vez desde hace mucho, voy a aprovecharlo" así que no se me ha ocurrido otra cosa que intentar vomitar el bizcocho. Lo he conseguido después de mucho esfuerzo y para cuando he acabado, se me han pasado las ganas de atracón.

Por una parte me parece fatal eso de haber vomitado, hace tiempo que no lo hacía y, tonta de mí, he recaído (por suerte, sólo recurro a ello en casos extremos, no me voy a obsesionar con volver a hacerlo), pero por otra he conseguido evitar meterme en el cuerpo las 1000 calorías extra que he estado a punto de ingerir como una cochina aspiradora. Vale que la manera de entretenerme no ha sido la mejor, pero esto me ha vuelto a abrir los ojos sobre la necesidad de encontrar algo que hacer y que nos entretenga cuando tengamos esas locas ganas de comer sin control.

Por otra parte, después de vomitar ha llegado una de mis compañeras, llamémosla Peach. Ella es de esas personas que no se da cuenta cuándo no te apetece hablar, ya sea porque estás cansada o porque no estás de humor. Yo estaba en el salón con mi portátil y lo último que me apetecía en el mundo era fingir estar normal y hablar, así que me he puesto los cascos y me he puesto música. Pues bien, Peach ha venido con ganas de cháchara y no me ha dejado de hablar, a pesar de que yo no quitaba los ojos de la pantalla y sólo hacía de vez en cuando un ahá desganado. 

 Suena tonto, pero no soporto que la gente no se dé cuenta de que molesta y de que no tengo ganas de hablar ni de escuchar su puñetera vida, sobre todo si esa gente no la considero amiga mía. A veces me gusta disfrutar de mi soledad y de mi silencio interno y odio que no lo respeten. Me ha cabreado mucho, en serio.

9 comentarios:

  1. Te ha cabreado pq es una cosa que irrita, coño. Te entiendo.
    No me parecen guarradas las cosas q haes cn la comida, son cosas normales q hace todo el mundo... bueno menos lo de vomitar el bizcocho. Eso ya sabes q esta mal. Casi me alegro de q t cueste trabajo, asi no te engancharas a ello.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No serían guarradas si me controlara, pero el paquete de chocolatinas es de 500 gramos y me lo como de una sentada. ¡¡Medio kilo de chocolate!! =S
      Y tienes razón, yo también en el fondo agradezco que me cueste vomitar porque así sólo lo uso de muuuuuy de vez en cuando, cuando me siento extremadamente mal, y sé que nunca lo convertiré en un habito.

      Gracias por comentar =)

      Eliminar
  2. Hay gente que no entiende el lenguaje corporal, o verbal o el lenguaje en general, a mí también me cabrea, no eres la única. Vomitar está mal y lo sabes, pero oye, has evadido el atracón y sabes que es algo que te cuesta y que no harás como costumbre así que tampoco habrá sido tan malo. Espero que te encuentres mejor respecto a lo de Alice, mucho ánimo! Besos (cambie el nombre del blog y mi perfil, antes era Emilia).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, estoy algo mejor, aunque es imposible olvidarlo de un día para otro. =)

      Eliminar
  3. Ay, bonica... Te entiendo. Lo de Alice y tus atracones...jolín, es que normal que te pusieras así... Cuando me quedo sola también me pasa, pero bueno...no soy la indicada para echarte la bronca por vomitar...Supongo que es una manera de reparar el mal que te metes dentro. Lo ideal es no atracarse...Ponle empeño a eso de buscar una forma de entretenerte cuando te quedas sola :*
    Y lo de Peach...Vaya hostia en la cara tienen algunas personas, aunque bueno, tampoco se trata de mandar a la mierda a todo el mundo, ya a la próxima te enclaustras en tu cuarto y ahí no creo que te vaya a molestar nadie :)
    Un besito!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nota: Ya te he hecho la entrada de kickboxing, ¡disfrútala!
      Nota 2: Hace nada me he acordado de ti por la movida esa de Peach.¿Sabes qué es peor que te hablen cuando no quieres escuchar? Que te hablen para mandarte a hacer cosas.
      Fuck it.

      Eliminar
    2. Lo ideal es no atracarse, como tú dices, así que estoy trabajando para evitarlo. Y creo que lo estoy consiguiendo, mis atracones han disminuido considerablemente desde hace unos meses, cuando eran prácticamente diarios.
      Muchas gracias por lo del kickboxing, a ver cuándo me pongo a ello.
      ¡¡¡Besos!!!

      Eliminar
  4. Hola!! primera vez que paso por tu blog y me gustó mucho. Con respecto a vomitar, cuidado con eso linda y que bueno que lo pienses objetivamente y no tengas planeado hacerlo de nuevo.

    Uf como te entiendo, en esas veces que uno quiere estar en su propio mundo, en su propio espacio y no escuchar a nadie siempre habrá alguien que te interrumpa. Pero quizas eso no lo debieses tomar tan a mal,eso te podría ayudar a distraerte un rato, a demas todas las personas somos distintas y bueno el/la chico/a necesitaba hablar con alguien y ya está.
    Un besito que tengas lindisimo fin de semana
    Te sigo =)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, muchas gracias por tu comentario ^^
      Creo que has dado en el clavo en esta frase: "Pero quizas eso no lo debieses tomar tan a mal,eso te podría ayudar a distraerte un rato, a demas todas las personas somos distintas y bueno el/la chico/a necesitaba hablar con alguien y ya está.". Si me molesta es culpa mía, nada tiene que ver Peach, que la pobre no lo hacía con mala intención y sólo quería convensar. Pero no lo puedo evitar, me cabreo ante esas situaciones jejeje

      Eliminar

Me gusta recibir comentarios críticos, pero respeta las distintas opiniones: puedes no estar de acuerdo con algo pero no hace falta insultar.